Cuidados de una colostomía o de una ileostomía

La ostomía se define como la anastomosis quirúrgica del tubo digestivo a la piel.
Inmediatamente después de realizar una intervención quirúrgica de derivación fecal es conveniente colocar una bolsa en la ostomía recientemente creada con el fin de recoger los efluentes que se excreten cuando la ostomía empiece a funcionar. La bolsa mantendrá al paciente limpio y seco, evitará que la piel entre en contacto con los efluentes y proporcionará una barrera contra el olor. Utilice un dispositivo transparente, recortado a medida, que recubrirá la piel periestomal sin comprimir el estoma permitiendo su visualización.

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